Todo está claro: la engañó para tener sexo, pero ¿quién lo filmó realmente? ¡Obviamente lo filmó con una cámara diferente a la que tenía en sus manos! ¡Una cámara oculta no da este ángulo y calidad de filmación! Así que el camarógrafo en la habitación con una cámara profesional y una cámara en sus manos sólo una farsa.
Una habitación roja, una vela parpadeante y una jugosa mujer con una máscara negra, con orejas de gato. Sus piernas abiertas y esperando ser castigada. ¿No es esto lo que todo macho brutal sueña, no es este el espectáculo que su cerebro imagina? Sus bragas colgando de la boca sólo acentúan su humillación. La empujan hasta el fondo, jadeando, pero ¿quién va a compadecerse de ella? Sus bragas se balancean de un lado a otro, la polla en tensión golpea con fuerza su húmedo agujero. Y no hay otro camino con la perra: ¡debe obedecer dócilmente todas las órdenes del amo!
Viola Bailey su nombre es